sábado, 24 de diciembre de 2016

Un bosque azul en la puerta de Galicia

El Bosque azul 
Al final del túnel hay luz, pero en algunas ocasiones puede haber magia, incluso donde antes podía haber desolación. Este es el caso de un solar situado junto al túnel de la A-6 y de la N-VI en Villafranca del Bierzo, en dirección A Coruña, donde el conductor recibe la impresión de un paisaje azulado que contrasta con el otoño de Os Ancares. El Museo Arqueológico de Cacabelos dentro de su exposición temporal Poli-zontes, en la que nueve creadores españoles de diferentes ramas artísticas reflexionan sobre el paisaje y el arte- propuso a la artista Raquel Montero una intervención artística en un lugar donde se visibilizase el arte contemporáneo y a la vez fuese una llamada de atención sobre los daños en el medio ambiente. Nació así El bosque azul, un proyecto en el que Montero y el museo, a través de su directora Silvia Blanco, quisieron recuperar una finca asolada por un incendio en el 2015. "Estudiamos muy bien el enclave en el que intervenir, porque quisimos hacerlo visible a todas las personas que entran en Galicia, ya sea por carretera como a través del Camino de Santiago, y a la vez que sirviese de presentación a la exposición que mostramos en Cacabelos", explica la responsable del museo. El bosque azul, al que se accede desde el propio Camino Francés a través de un sendero flanqueado por las ramas de los arbustos azulados, fue creado como una obra efímera, el recorrido de esta pieza natural durará unos dos años. La propia naturaleza y el tiempo irán deshaciendo la obra .... Desde su inauguración el día 2 de diciembre, supone un impacto para los peregrinos y conductores que atraviesan la zona. Mientras a escasos metros rugen los motores y circula la prisa del siglo XXI, en El bosque azul la naturaleza muerta cobra vida. "Que cada uno lo interprete como desee, pero es patrimonio de todos", explica con ilusión su creadora.
Suso Varela. Villafranca del Bierzo. La Voz de Galicia, miércoles 14 de diciembre de 2016.

Feliz Navidad. De nuevo en enero.

viernes, 23 de diciembre de 2016

Händel nos conforta contra la barbarie


William Christie
Para William Christie (Buffalo, Nueva york, 1944) el oratorio El Mesías de Händel es un eterno compañero. "Tengo muchas historias personales relacionadas con esta obra", confiesa por teléfono a El País. No solo recuerda su primera audición en su localidad natal con diez años, sino también que en ella descubrió su instrumento: el clavecín. "Me fascinó tanto su sonido que que arruiné el piano familiar poniendo chinchetas en sus macillos", William Christierememora entre risas. Christie esta inmerso este diciembre en una gira europea con El Mesías al frente de su grupo, Les Arts Florissants. Arrancó el pasado día 9 en Baden Baden y culminó el 21 de diciembre en el Auditorio Nacional de Madrid, tras haber pasado por París, Barcelona, Budapest y Londres. "Conozco muchas personas que tienen una relación similar con este oratorio de Händel, especialmente en el entorno anglosajón", añade. Pero Christie cambió dástricamente de entorno en un momento de su vida. En 1970 decidió abandonar su país tras oponerse a la Guerra de Vietnam y se afincó en Francia. "No sé que hubiera sido de mí si no lo hubiera hecho. Quizá estaría muerto y no habría tenido la misma carrera musical", opina. En París encontró acomodo junto a otros compatriotas, como la soprano Judith Nelson, tocando música contemporánea y música antigua en el Five Centuries Ensemble, donde también coincidió con Jordi Savall. "Teníamos mucha libertad y además la música contemporánea estaba bien pagada; tocábamos composiciones de Bussotti, Berio, Boulez y Luis de Pablo, pero también obras de Monteverdi y Gesualdo", recuerda. En torno a 1976 decidió especializarse . "Opté simplemente por la música que más amaba y me centré  en los siglos XVII y XVIII". Primero se vinculo al grupo Concerto Vocale, de René Jacobs, pero en 1979 fundó su propia criatura que bautizó con el título de su primera producción, la ópera breve Les Arts Florissants, de Charpentier. ...Se centraron en recuperar numerosas obras del barroco francés (Charpentier, Lully, Campara o Rameau), pero pronto añadieron Monteverdi, Purcell o Händel..... Händel ha sido siempre uno de sus compositores de cabecera . "Para mí pertenece a la gran tradición humanista del Renacimiento y el Barroco". Aunque El Mesías  contiene música para cualquier parte del año litúrgico, opina que transciende lo meramente religioso: "Suelo decir a mi grupo que es indiferente ser creyente o no para adentrarse en esta obra. Yo mismo no creo en la encarnación, ni en la muerte de Cristo, ni tampoco en su resurrección". Para Christie trata de la condición humana y de su tragedia. "Es una obra que nos conforta y da esperanzas, especialmente  cuando vemos lo que está sucediendo en Alepo o en el Mediterráneo", asegura. Está convencido que esta música hace mejores a las personas....Le gustaría ser recordado: Como alguien que dio a las personas consuelo y esperanza con la música."
Pablo L. Rodríguez.  Zaragoza. El País, domingo 18 de diciembre de 2016

jueves, 22 de diciembre de 2016

Hélène Carrère d'Encausse

Hélène Carrère d'Encausse
Fueron seis años excepcionales, seis años que alumbraron un nuevo mapa geopolítico. Arrancaron el 11 de marzo de 1985 con el nombramiento de Mijail Gorbachov como secretario general del Partido Comunista y se cerraron el 8  de diciembre de 1991 con el anuncio de al disolución del antiguo gran imperio de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, del que se acaba de cumplir el 25 aniversario. A este vibrante y fascinante periodo de la historia reciente dedica Hélène Carrère d'Encausse su última obra, Seis años que cambiaron el mundo: la caída del imperio soviético, editado por Ariel. Secretaria perpetua de la Academia Francesa, exconsejera del Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo y exvicepresidenta de la Comisión de Exteriores del Parlamento Europeo, Carrère d'Encausse es una historiadora de poliédrico recorrido profesional y vital. Hija de un aristócrata georgiano que emigró a Francia y reconstruyó su vida como taxista, Carrère d'Encausse, nacida en París como Hélène Zourabichvilli, nunca dejó de lado las raíces de su padre en tierras exsoviéticas y se convirtió con el tiempo en una de las más reputadas especialistas en historia rusa. Elegante, firme, serena, demuestra estar en plena forma a sus 86 años. Concedió una entrevista en el hotel de las Letras de Madrid, a su paso por España. En ella disecciona las figuras de Gorbachov, Yeltsin y Putin. "Rusia es una democracia frágil pero con elementos positivos. Las clases medias han aparecido y hay un nivel educativo muy alto".....
Joseba Elola. Conversaciones con futuro. El País, domingo 11-12-16

miércoles, 21 de diciembre de 2016

El elixir dorado, 2

La caja que custodia la dorada ambrosía es de madera de roble, la misma que que utilizan los toneleros para hacer los barriles. Y las 25 líneas en las que se divide el cubo crean a  su vez un contorno asimétrico que representa a su vez el recorrido del río Charente, caldo de cultivo de los viñedos de Cognac. En esta región al suroeste del país, crecen las cepas de uva blanca de las que se obtiene el doble destilado de vino. Aquí, a casi 500 kilómetros de distancia de la capital gala, se encuentra la bodega que abrió Richard Hennessy en 1774 para alojar sus aguardientes más exquisitos. Hoy día es la mayor reserva de añejos del mundo. Este mercenario irlandés recibió unos terrenos por los servicios prestados al ejército del rey Luis XV. Entonces decidió convertirse en bodeguero. Ese mismo año empezó a exportar sus licores por Europa. Luego, Estados Unidos. Después el Lejano Oriente. Todo personaje ilustre que se preciara brindaba con su cognac. De Napoléon a los zares de Rusia. Ahora la compañía que forma parte del conglomerado del lujo LVMH(Louis Vuitton, Moët, Hennessy), vende más de 40 millones de botellas al año. La mayor parte en el extranjero."Nos gusta sumergirnos en diferentes culturas", explica Bernard Peillon, presidente de la marca. Una comunidad que lleva años laureando la calidad de su coñac es, paradójicamente, la del rap."Ellos necesitaban sueños y recurrieron a los productos más prestigiosos", dice Maurice Hennessy, embajador de la firma. La maison francesa les abrió las puertas del lujo y ellos no tardaron en rimar a su ritmo....A la mañana siguiente de la fiesta en París, tocaba probar el ansiado elixir. Y no hay mejor sitio que la bodega de Cognac. Donde empezó todo. Frente al río Charente. Sintiendo la humedad que desprenden las barricas. Renaud de Gironde, de 38 años, hace los honores. Su tío le mira con orgullo. Continúa el legado. "Déjense llevar por la paleta de aromas. Noten la intensidad. Luego den un suave sorbo. Les sorprenderá su frescura, su toque afrutado. Aprecien los ocho matices de cada aguardiente. Degusten la historia de Hennessy en su paladar".
María Hervás. El País, 24 de abril de 2016

martes, 20 de diciembre de 2016

Picasso, Renoir y la vulgaridad

Eurídice de Renoir
Picasso admiraba a Renoir. En sus últimos años cuando el pintor malagueño se obsesionó con el sexo y la muerte, retrató a partir de una fotografía a su admirado colega francés. Hacía retratos imaginarios de los grandes inmortales de la pintura, además de a Rembrandt, Velázquez, Rafael o El Greco, pintó a Renoir. Podemos reconocerlo en un cuadro de 1970 del Museo Picasso de París, sentado en su sillón Thonet, con el cuerpo encorvado y los muñones mutilados de artrítico terminal mirándonos con su mirada negra y desafiante de pájaro herido, tal y como aparecía en una fotografía que Picasso poseía y copió a lápiz. Dos veces. (Nunca consiguió verle personalmente: Renoir no lo admitía. Como demostró Helène Klein, el coleccionismo de Picasso era básicamente funcional. Coleccionaba lo que podía servirle para su propia pintura. Y fue de Renoir de quien acabó teniendo más cuadros. Junto a Ingres y a Rafael, Renoir es una de las fuentes más evidentes de su período clasicista. Basta contemplar el espléndido desnudo sentado titulado Eurídice, un cuadro que Picasso compró en torno a 1920 y que cuelga ahora  en la exposición del Museo Thyssen, para advertir su afinidad con los monumentales desnudos que el pintor español pintaba en esos años. Pero su fascinación por el viejo maestro no se limita a esos desnudos ni al período neoclásico. Richardson la reconoce también en sus maternidades y en los retratos de los hijos. Mencionaré dos ejemplos. El primero es un retrato de Paul, vestido con traje blanco de Pierrot, pintado en 1925, que se conserva en el Museo Picasso de París y que es una transposición obvia de un retrato de Claude Renoir en 1909 vestido con  un traje rojo. El segundo es un pequeño retrato de 1905, también de Claude, esta vez comiendo sopa, que cuelga en la penúltima sala de la exposición del Thyssen prestado por el Worcester Art Museum... Si nos fijamos bien en esos cuadros vemos que no son sus supuestas cualidades clásicas lo que Picasso busca en Renoir. Es su sello. Su fuerza. Y su vulgaridad, por decirlo sin ambages. Renoir, que era un visitante compulsivo de museos, imponía a sus modelos cuando los pintaba, las poses más comunes de la historia del arte... El Renoir tardío, por decirlo con una imagen feliz de Guy Cogeval, "osa y usa de la vulgaridad". Como Rafael o como Murillo, no solo se atreve a ser vulgar, sino que hace de la vulgaridad costumbre. Y la pone al servicio de unas imágenes capaces de grabarse en la memoria visual de millones de personas. Picasso (como Apollinaire) admiraba y envidiaba esa cualidad, tanto en Renoir como el aduanero Rousseau (aunque la de este era involuntaria)
Tomás Llorens. El País, sábado 3 de diciembre de 2016

lunes, 19 de diciembre de 2016

Eternité

Audrey Tautou en Eternité
El primer largometraje fran-cófono del vietnamita Tran Anh Hung (El olor de la papaya verde, Cyclo ), se titula Eternité. Pero la historia que cuenta dura algo menos, unos cien años, aunque en ningún momento se especifican las fechas exactas en las que transcurre la acción. El primer personaje que llena la pantalla con su cándida presencia es el de Valentine (Audrey Tautou), una niña dulce y sensible que crece en el seno de una familia aristocrática de fin de siglo y que, más tarde, se convierte en una mujer atractiva que se casa y tiene media docena de hijos. Uno de ellos, Henri (Jérémie Renier, Saint Laurent ), se casa con otra mujer radiante, Mathilde (Mélanie Laurent), que también es madre de varios hijos. La mejor amiga de Mathilde se llama Gabrielle y está casada con Charles (Pierre  Deladonchamps). Nacimientos y muertes se suceden así a lo largo de los años, marcando el devenir de las tres mujeres que ejercen de motor dramático de Eternité. Algunos de sus hijos mueren en la guerra; otros son víctimas de enfermedades o accidentes desafortunados. Tran Anh Hung, que firma también el guión, ha tardado seis años en sacar adelante el filme. Entre otros obstáculos, encontró el rechazo de muchos productores al apostar por una propuesta narrativa como ésta, que prescinde de situaciones conflictivas y diálogos elaborados para centrarse en sensaciones estéticas y emociones universales.
Pedro Calleja. El Mundo, viernes 16 de diciembre de 2016

domingo, 18 de diciembre de 2016

Un amor correspondido

Andreï Makine
Hace dos días tuvo lugar la recepción de Andreï Makine en La Academia Francesa para ocupar el puesto vacante por la muerte de Assia Djebar. Es un escritor nacido en Rusia, conocido en España por su libro Le testament français (Mercure de France,1995), publicado por Tusquets. Una declaración de amor apasionado a Francia y a la lengua francesa. La lengua de su abuela Charlotte, la que ella le enseñó, transmitiéndole ese amor por un país y su lengua, a la que dedicó su tesis presentada en la universidad de Moscú. Era hija de una familia francesa que se traslada a Rusia en 1903, poco después de la visita del Zar Nicolás II a París. Charlotte añora la ciudad, su ambiente,  y cuenta a sus nietos cómo es la vida en esa ciudad, con fantasía, con una lengua poética:  la catedral de Notre Dame "esa gigantesca roca modelada por la erosión del tiempo". También les lee fábulas, textos de escritores, les recita poemas. Francia se convierte en algo mítico. "Soñé tanto tiempo con Francia que sería imposible no tener una visión literaria". De ahí el choque que sintió al llegar a París en 1987 entre el país soñado y el país que descubre. Se instala en Belleville y escribe pero sus primeros libros son rechazados sistemáticamente. Malvive hasta que consigue un puesto de profesor de literatura rusa en la École Normale y Sciences Po.  Le testament Français, su cuarta novela, publicada en una pequeña editorial, es por fin recompensada con el premio Goncourt y el Médicis con un millón de ejemplares vendidos. Con los años ese amor se ira tiñendo de inquietud por la deriva de la literatura francesa, en particular la novela, hacia la mediocridad. Le testament français fue recibido por los profesores de francés como un regalo. Recuerdo el primer viaje a París con los alumnos después de su lectura que me permitió ofrecerles una nueva mirada. Así revivimos, entre otras escenas, siguiendo el relato de la abuela del escritor, la colocación de la primera piedra del puente Alexandre III por el zar Nicolás II para simbolizar la amistad franco-rusa  firmada en 1891. El discurso pronunciado entonces por el poeta José Luis Heredia que valora la presencia del zar y la zarina como un homenaje a la lengua francesa cautiva de tal modo al pequeño Andreï  que ese mismo día decide apropiarse de esa lengua, la clave del misterio del país del que les habla su abuela. "Ce jour-là je décidai de lui voler sa magie/Ese día decidí robarle su magia". Treinta años después de su llegada a París en 1987, es recibido como miembro de la Academia.

sábado, 17 de diciembre de 2016

Auvers-sur-Oise

El jardín de Daubigny de Van Gogh
Vincent van Gogh fue un pintor de excesos: muy expresivo, muy atormentado y muy inquieto. En los 37 años que vivió se le conocieron 38 direcciones en cuatro países. Entre otros lugares, vivó en La Haya, Amsterdam, Bruselas, Amberes, Londres, Ramsgate, París, Arlés, Saint-Rémy-de-Provence y Auvers-sur Oise. A esta villa de unos 7.000 habitantes situada a 27 kms de París, en el noroeste de la región dela Isla de Francia, llegó animado por Pissarro, para tratarse con el doctor Gachet y pasó sus últimos 70 días, que fueron muy intensos y le dieron para crear 72 telas, 33 dibujos y un grabado. Francia fue su último puerto. Su hermano Theo se instaló en Montmartre en la década de 1880 y convenció a Vincent de que probara suerte en la que entonces era la capital del arte. Allí entabló amistades con compañeros de su gremio. Luego se puso a prueba de la luz del sur, conoció manicomios y altibajos, hasta que halló reposo en el norte. Auvers está volcada con Van Gogh. Esparcidas por el pueblo hay 29 placas con imágenes de los cuadros que pintó y los motivos (ya sea edificio o panorámica) que los inspiraron, tal cual han resistido el paso del tiempo. Permiten identificar telas notables como Paisaje con carruajes y tren de fondo, sobre la que el 13 de junio de 1890 escribió en una carta a su hermana Willemine:"Busco expresar el tránsito desesperadamente rápido de las cosas en la vida moderna". O Campos de trigo en el cielo nublado, con la que quiso, según dijo a Theo, explicar lo que no sabía decir con palabras. En el Auberge Ravoux pernoctó por 3,5 francos al día. Su habitación y la del entonces compañero de hostal, el holandés Antón Hirschig, permanecen intactas. el restaurante es una postal antigua, mantiene mobiliario y atmósfera de un clásico café de artistas. Amigo de Corot y Cézanne, influenciado por Courbet y considerado precursor del impresionismo, Charles-François Daubigny pintó muchas escenas del valle del Oise. Tuvo casa en el pueblo y su jardín fue pintado por Van Gogh en uno de su cuadros memorables de esta etapa: El jardín de Daubigny. El doctor Gachet fue el culpable de que Van Gogh llegara hasta aquí para tratar sus brotes. Era un personaje extraordinario: médico, coleccionista y artista. En la casa del doctor Gachet , visita gratuita, podemos descubrir en su estado original la presse à bras /plancha manual de grabado y varios elementos que aparecen en las telas de Van Gogh, como la célebre mesa roja del famoso Retrato del doctor Gachet. El paisaje que rodea la villa tiene el aura de la intimista película que realizó Maurice Pialat en 1991, Van Gogh, que profundizaba en la posible relación entre el pintor y la hija del doctor, Marguerite, cuyo piano también sigue ahí, idéntico al del cuadro Marguerite Gachet al piano.... A veinte minutos a pie aguarda el castillo de Auvers inmortalizado también por el pintor en su Paisaje con el castillo de Auvers. No se puede decir adiós al pueblo sin visitar su iglesia ¿Cómo no recordar la tela Iglesia de Auvers ? Aquí sigue con el campanario cuadricular de la región, similar a como se la describió a Willemine:"Tengo un cuadro más grande de la iglesia -un efecto en el que la construcción parece ser violeta contra un cielo de simple azul oscuro, cobalto puro; las ventanas parecen como manchas de azul ultramar, el tejado es violeta y en parte anaranjado-". Avanzada la tarde del 27 de julio de 1890, Vincent sufrió una recaída y su estado de ánimo empezó a dar bandazos por estos campos que había pintado sin desmayo durante 69 días. De pronto sacó una pistola y se disparó en el pecho. Consiguió llegar a la habitación número 5 del Auberge Ravoux. Hirschig avisó a Theo que llegó de París al día siguiente para verlo agonizar. Fue enterrado en el cementerio de Auvers-sur-Oise. Seis meses después falleció Theo. En 1914 su esposa. Johanna, consiguió que lo enterraran junto a su hermano.
Use Lahoz. El Viajero. El País, viernes 16-12-16

viernes, 16 de diciembre de 2016

Boris Chamartz y el movimiento que digiere el mundo

Miembros de la compañia en Manger.
 ©Foteini Christofilopoulou
El verbo comer no solo implica llevarse alimento a la boca, o al menos así lo ve el coreógrafo Boris Chamartz , que aterriza después de 16 años en Madrid para representar dos de sus creaciones. La primera Manger, una obra en la que explica como digerimos el mundo, podrá verse en los Teatros del Canal este miércoles y jueves dentro del trigésima cuarta edición del Festival de Otoño. La segunda, 20 bailarines para el siglo XX , consiste en la representación si- multánea de grandes solos dancísticos, que los asistentes podrán disfrutar durante toda al tarde del sábado, mientras visitan las salas y los pasillos del Museo Reina Sofía. Reconocido por insuflar de un carácter innovador la danza y romper con las leyes formales de la escena, Chamartz se atreve esta vez con Manger a analizar cómo digerimos  la realidad. Durante la obra que ya ha podido verse en el Musée de la danse francés o en la Tate Modern londinense, 14 bailarines se alimentan de los folios en blanco en los que se proyectan diferentes imágenes reales. "Es mi coreografía más extraña y estoy muy orgulloso de ella. Podríamos decir incluso que es una ODNI, objeto danzante no identificado. Empezó siendo algo solo mío, pero después la compartí con el resto de los bailarines y trabajamos sobre los significados de digerir. Y cuando digo digerir no solo hablo de comida. Por ejemplo, cuando vemos las noticias a la hora de comer, llenas de guerras y muertes, de alguna manera nos llenamos al boca para no llorar y gritar. Así que esta obra no se trata  de analizar una comida con entrante, plato y postre, sino cómo nos enfrentamos a lo que está a nuestro alrededor", explica el artista. Durante toda la tarde del sábado, se representará en el Museo Reina Sofía, 20 bailarines para el siglo XX . En esta coreografía, Chamartz revive grande obras del siglo XX, que interpretarán bailarines y performances muy cerca del del público en las salas y pasillos de este museo. "No hay un escenario ni una iluminación específica, ni un vestuario determinado. Los bailarines simplemente aportan sus conocimientos y su memoria. Se trata de una representación  muy horizontal ya que no se desarrolla en un espacio concreto sino que invade todo el museo con una gran apertura estética", describe el autor...
Mai Montero. El País. Madrid, 15 de diciembre de 2016 

jueves, 15 de diciembre de 2016

Reparar a los vivos

Un trasplante de corazón es una de las operaciones más complejas que se pueden llevar a cabo no solo en un quirófano, sino en una sociedad. Empieza con una tragedia y termina con el mayor regalo que se puede conceder a una persona: la muerte de un joven surfista de diecinueve años en un accidente de tráfico desemboca en la vida de una mujer de 51 años. En medio, todo debe funcionar de forma perfecta y rápida: médicos, expertos en trasplantes, transportistas.... Sobre este proceso, que describe con minuciosidad, construyó Maylis de Kerangal (Tolón, 1967) Reparar a los vivos (Anagrama), la novela que le ha convertido en una de las escritoras más famosas de Francia. Después de su publicación en 2014, ha ganado siete premios literarios de primera fila y ha sido adaptada al teatro y al cine (esta última dirigida por Katell Quillévéré y protagonizada por Tahar Rahim y Emmanuelle Seigner, llegó a las pantallas francesas en noviembre. Tras una sólida carrera como editora y haber publicado varias novelas como Carniche Kennedy o Nacimiento de un puente que alcanzaron el reconocimiento de la crítica, Reparar a los vivos supuso un cambio radical en su vida como escritora. Y los atentados yihadistas del 13 de noviembre de 2015 en París, que afectaron al mismo barrio en que vive con su familia (es madre de cuatro hijos), trastocaron su forma de ver el mundo y también la novela en la que estaba trabajando, centrada en al reproducción de la cueva de Chauvet. Entre los dos acontecimientos, los atentados y un trasplante, existe una conexión muy fuerte: el azar y la tragedia, y también el hecho de que ambos recorren el corazón de la sociedad, unen a personas de todo tipo....
Guillermo Altares. El País Semanal/ 4-12-2016

miércoles, 14 de diciembre de 2016

El elixir dorado

Se llama Hennessy 8 y es el cognac más preciado del planeta. Su contenido cargado de historia reposa en una botella de cristal de Baccarat. En la escuela de Bellas Artes de París, enclavada en la ribera izquierda del Sena, una caja de madera se ha convertido en el objeto de deseo entre los invitados a una exclusiva velada. Tras una cena de postín, los comensales descubren el secreto oculto en el interior del misterioso recipiente: una espectacular botella de Hennessy 8, el coñac más caro del mundo. Hasta un litro del elixir supremo reposa dentro de una escultura de cristal de Baccarat. Su valor asciende a 35.000 euros. Un tesoro líquido que simboliza la historia de la firma del coñac francés más vendida de todos los tiempos. Hennessy sorprende ahora a su público con esta espectacular pieza de museo. Ochos anillos rodean la botella y reflejan el tono cobrizo del preciado licor. Cada uno de esos círculos representa una generación  de maestros mezcladores pertenecientes ala dinastía Fillioux, una familia vinculada a la casa desde sus comienzos. De padres a hijos, de tíos a sobrinos. Los magos de esta saga han transmitido durante 200 años el savoir faire del mejor coñac. Ahora Yann Fillioux, séptimo en la línea de sucesión, les dedica a todos ellos su última creación. Hennessy 8 surge de la mezcla de ocho tipos de lso mejores  aguardientes que se conservan en la bodega de la maison desde hace décadas. Incluso siglos. Ahí radica su astronómico precio. Seis de los añejos elegidos por este artesano fueron utilizados en su día por sus antepasados. El séptimo por el mimo a lo largo de su carrera. Y el octavo fue seleccionado por su sobrino y sucesor, Renaud de Gironde. "Ha sido un proyecto nostálgico. Quería demostrar que los que me precedieron estaban tan obsesionados con la calidad como yo. Solo así garantizamos la calidad del coñac del futuro", dice Fillioux, de 69 años. Esa es la lección que ha inculcado a De Gironde y que esa noche repite a todo aquel que le pregunta por el éxito de Hennessy, la empresa en la que ha trabajado durante 50 años.....
María Hervás. El País, 27 de abril de 2016

martes, 13 de diciembre de 2016

Sin miedo al amor

Mauricio Cattelan posa con una de sus obras.
Hace cinco años juró que lo dejaba para siempre. Mauricio Cattelan, una de las personalidades más cotizadas del arte actual, acababa de cumplir 51 años y de vivir su mayor consagración: una retrospectiva en el Guggenheim de Nueva York en la que decidió colgar todas sus obras hasta la fecha del majestuoso patio de luces del edificio de Frank Lloyd Wright, "igual que si fueran salamis". Se dijo cansado de un mundo, del arte contemporáneo, cada vez más dominado por el poder del capital. El mismo que convirtió a este hijo de modestísimos paduanos en un hombre rico tras vivir con tres euros al dí hasta 1997, según su confesión. Su retiro no habrá durado más de media década. Acaba de interrumpir su jubilación anticipada para escenificar su regreso por la puerta grande con una exposición en La Monnaie de París. La muestra titulada Not Afraid of Love ("Sin miedo al amor"), abierta hasta el 8 de enero, recoge 17 de sus piezas seleccionadas por el mismo a modo de retrospectiva parcial. Allí esta su papa de Roma aplastado por un meteorito (La Nona Ora ), sus nueve cadáveres recubiertos por sábanas de mármol (All ) y su polémico Hitler arrodillado ( Him ), vendido el año pasado por 15 millones de euros. La muestra parece concebido como un disco de grandes éxitos. "Yo la veo más bien como un reboot de mi obra, en el que cada trabajo establece una nueva relación con los demás, en un contexto diferente", responde Cattelan, alérgico a las entrevistas, por correo electrónico a El País. El artista reconoce que el museo le invitó a exponer obra nueva. "Pero no se me ocurrió ninguna opción válida", admite. "Puede parecer menos generoso que crear algo nuevo, pero créame cuando le digo que es totalmente sincero y meditado", asegura. Poco importa el contenido: la exposición parece estar pensada como un happening ideado para poner en escena su regreso al mundo del arte.....
Alex Vicente. El País, miércoles 30 de noviembre de 2016 

lunes, 12 de diciembre de 2016

Una chica Almodóvar en Francia

Lola Dueñas
Ningún personaje la atemoriza. "Me atrevería con todos. El único miedo sería hacerlo mal". Es Lola Dueñas ( Barcelona, 1971), que acaba de ser premiada por el festival Cineuropa de Santiago por su talento y su versatilidad. Un galardón que dedicó a sus compañeros de Los fenómenos, que dirigió el compostelano Alfonso Zarauza. "Con ellos viví uno de los momentos más bonitos de mi profesión", afirma la actriz, que tiene una especial conexión con Galicia, donde veraneó en la infancia, ya que su familia materna es gallega -"mi madre y sus hermanas por Navidad cantan en gallego"-, además de rodar varias veces, como en Mar adentro, con Amenábar. Estrena Les ogres y próximamente, el filme que ha rodado con la argentina Lucrecia Marte, Zama. "Me siento la actriz más afortunada del mundo. Era mi directora favorita y me ha llamado". Y están los hermanos Almodóvar detrás. Con Pedro como director grabó cuatro películas. "En Francia me salvó la vida ser "chica Almodóvar". Estoy segura de que no ser así, nadie me hubiera hecho caso. Ha sido lo que más me ha podido ayudar. Me fuí a Francia hace seis años. Era un momento en el que empezaba la crisis y no había trabajo. Además me gusta el cine francés, siempre me ha enamorado y quería trabajar allí. Yo me dí cuenta de que no iba a rodar  y entonces dije: Para estar estancada, triste y sin rodar, me voy e intento cumplir mi sueño". Y, por suerte ha salido bien. Ahora nota que la cosa está más animada, pero sigue siendo difícil sacar adelante una película. Así, filmes como Les ogres creo que sería muy complicado rodarlos en España. En Francia la cultura es sagrada y la protegen independientemente de quien sea el que gobierne. La cuidan, entre otras cosas, porque es una industria que da muchísimo dinero y aquí no se enteran de eso"......
Montse García. La Voz de Galicia, 18 de noviembre de 2016

domingo, 11 de diciembre de 2016

La urgencia de la transmisión

En el año 2005 Siruela publicó en su colección Biblioteca de Ensayo, Elogio de la transmisión firmado por Georges Steiner y Cécile Ladjali que había sido publicado tres años antes por Albin Michel, Éloge de la transmission. Le maître et l'élève. El libro, del que ya les hablé en uno de los textos de 2012, es un diálogo entre el maestro, Georges Steiner y una profesora joven, Cécile Ladjali que enseñaba entonces en un instituto de la periferia de París, en Seine-Saint Denis, en una de las llamadas zonas sensibles. Los alumnos habían preparado un libro de poemas Murmures, sesenta sonetos sobre el mito de la caída. La profesora solicita  al brillante maestro de renombre internacional su colaboración enviándole los sonetos escritos por sus alumnos. Se inicia entonces un intercambio de puntos de vista  y la puesta en práctica de una pedagogía de la exigencia. La experiencia muestra la satisfacción de los dos polos del acto educativo: el júbilo de los alumnos al contar con el prefacio de Steiner en el libro que ellos habían preparado y la de ambos profesores. Así se refiere a ella el ilustre profesor en su prefacio: "Muchas veces en mi imaginación recreo una clase de Mme Ladjali, con su encantadora voz, mientras recita a los poetas que son como sus deudos, o lee las sucesivas versiones de todas las respuestas que recibe de la clase. Qué suerte han tenido estos estudiantes de escucharla  y que gran recompensa para ella su iniciadora en lo trascendente".

sábado, 10 de diciembre de 2016

Tejados y terrazas de París

L'oiseau blanc
L'oiseau blanc desapareció el 8 de mayo de 1927. Su ambición no era otra que pasar a la historia como el primer avión en realizar la travesía transatlántica sin escalas. Un París-Nueva York para la leyenda. Jamás llegó a su destino. Desde hace un año una réplica exacta del mítico avión está suspendida sobre la última planta del lujoso hotel The Peninsula, una de las mejores y más exclusivas terrazas del ciudad. Desde allí los iconos de una tablet ofrecen la opción de sobrevolar la ciudad a los mandos de un avión imaginario. Un vuelo en un pequeño pájaro blanco para descubrir un París recóndito, escondido entre el cielo, los mitos y los sueños...Me acerco a este mar de cubiertas grises salpicado de pequeñas chimeneas de terracota  y a las historias que tanto inspiran.  Delphine Bürkli, concejal del distrito IX, ha promovido su candidatura para que los tejados parisinos formen parte del Patrimonio Mundial protegido por la Unesco. En su opinión, y en la de los miembros del comité de apoyo, la singularidad de este paisaje urbano le confiere un valor universal que ha de ser preservado. Alturas perfectas para conocer los secretos de París, que permiten adentrarse en esta singular geografía. Desde lo alto de la Tour Eiffel, la ciudad se escapa. Enrique IV, fue uno de los artífices de este interesante tapiz que se despliega a mis pies. En su empeño por mejorar y embellecer algunos de los símbolos de la ciudad, como el Louvre, sustituyó sus viejos tejados de adobe y madera por los de pizarra y teja. Coronan majestuosamente las esquinas y los arcos principales del Palacio del Louvre. Es interesante contemplarlos a través de la pirámide de cristal de I. M. Pei. El mismo monarca mando construir la place des Vosges. Casi un perfecto cuadrilátero, está rodeada de edificios de dos plantas realizados en piedra, ladrillo rojo y tejados de pizarra azul de Angers. Sus tejados parecen mirarnos con esos pequeños ojos que se abren en sus frentes prominentes. Estamos ante las célebres mansardas parisinas que dan tanto carácter a la ciudad. El término proviene de François Mansart, el arquitecto francés que generalizó el uso de estos tejados abuhardillados de fuerte pendiente en el barrio de Le Marais donde se encuentra la plaza. En el ático de los grandes almacenes BHV, con el buen tiempo se despliega Le Perchoir Marais un pop-up con una atmósfera décontractée y branchée similar a su terraza hermana Le Perchoir del distrito XI que permanece abierta todo el año. Tres museos con terrazas interesantes: el Quai Branly, con su restaurante Les Ombres, la terraza del Georges, en el Centro Pompidou y la del Instituto del Mundo Árabe. La Ópera otro soberbio edificio tiene  una elegante cúpula  de un característico y curioso color verde, el mismo que el de la Estatua de la Libertad de Nueva York, regalo de la ciudad de París. El color verduzco se debe al cardenillo, una sustancia venenosa producida por la oxidación del cobre en contacto con la humedad. Es una cubierta sensacional que esconde un curioso secreto que no se aprecia a simple vista: sus paneles de abejas...Amanece y sobrevuelo las gárgolas de Notre Dame, las elegantes cubiertas acristaladas del Grand y el Petit Palais, la majestuosa cúpula de los Inválidos, las buhardillas de la Rive Gauche, el reloj del Museo d'Orsay, las formas bizantinas del Sacré Coeur con esa blancura algo chocante en una ciudad tan apegada a los tonos grises. Buscando el París del futuro  me adentro en el Bois de Boulogne y me sorprenden los tejados superpuestos de la Fundación Louis Vuitton. Velas de vidrio, vigas de madera. Transparencias, naturaleza, movimiento. Nuevos códigos, nuevos lenguajes. Una interesante intervención del artista Daniel Buren ha puesto colorido a estos nuevos tejados de vidrio concebidos por Frank Gehry. Les Halles lucen desde hace unos meses el tejado más grande y sorprendente de la ciudad, 15 metros de altura y casi 100 de extensión. Bautizado como la Canopée  y realizado con láminas de vidrio dispuestas como escamas, es el elemento esencial de la remodelación de este espacio urbano. Innovación, elegancia y rebeldía bajo este cielo plomizo que anuncia lluvia. Au revoir, petit oiseau. Hasta siempre, París.
Vicky Vilches. Traveler, noviembre 2016.

jueves, 8 de diciembre de 2016

Justice

El dúo francés Justice
Hicieron bailar a medio mundo en 2006 con su digerible electrónica teñida de disco, pero cinco años después se hizo el silencio. Con su nuevo trabajo, Woman, el dúo francés se vuelve más maduro pero sin permitirse ninguna concesión a la nostalgia. Un crucifijo cubierto de líquido viscoso. Podría ser gasolina. Visto bajo la luz, el material cobra un reflejo irisado. Si todo va a saltar por los aires, que sea entre colores alegres. Las canciones que esconde esta carátula, escuchadas a todo volumen en un despacho de su discográfica parisina, parecen contener este mensaje. Diez temas compuestos y grabados en una ciudad sumida en el horror, bajo un sol de invierno , en una casa perdida. Hay ecos de Georges Moroder y Donna Summer, de sus admirados Beach Boys mezclados con bases electrónicas, de unos Jackson 5 revisitados por Tren Reznor. Así suena Voman, el regreso de uno de los mayores fenómenos musicales de la década pasada. ¿A qué se han dedicado desde su último álbum, Audio Video Disco, publicado en 2011? "A vivir. A disfrutar de nuestros amigos y nuestras familias ", responden al unísono. Van vestidos con sendas bombers de colores distintos y camisetas con motivos gráficos que hacen que uno se pregunte si se llaman por las mañanas para ponerse de acuerdo. Su aspecto sigue siendo juvenil, aunque ya no tienen veinte años. Más bien se acercan a los cuarenta. El rictus travieso de Xavier de Rosnay, hoy padre de familia, se ha vuelto melancólico. Gaspard Augé se ha cortado la melena y ganado un poco poso maduro. Dicen que se plantearon Woman como si fuera un disco de góspel, capaz de proporcionar un sentimiento de comunión a quienes lo escucharan. "En este período de nuestra vidas nos sentimos cómodos con la idea de proponer cosas positivas. Es un momento luminoso y solar. Hacer música oscura es muy fácil. Lo difícil es lo contrario", afirma De Rosnay. "Nuestra vida ha cambiado. Aunque no seamos Bob Dylan, por que no volcamos nuestras tripas sobre  el papel", ha llegado cierta madurez", confirma Augé. Durante la veintena vivieron de noche y llenaron clubes con su electrónica teñida de disco digerible por las masas.  ¿Cambia su trabajo cuando a uno ya no le apetece acostarse de madrugada" "Claro que cambia. Y no intentamos ir contra ese cambio. Sería muy triste hacer música como niños de 20 años. Los grupos que envejecen bien son los que hacen la música que corresponde a su edad", responde De Rosnay.....
Alex Vicente. París. ICON. sábado 3 de diciembre de 2016  

La séptima función del lenguaje

Roland Barthes
Fue la "muerte del autor" en el sentido más literal. En febrero de 1980, Roland Barthes salía de almorzar con François Mitterand, a punto de convertirse en presidente, cuando una camioneta lo atropelló en plena calle. A Laurent Binet (París, 1972) ese desenlace siempre le pareció sospechoso, demasiado improbable para ser casualidad. Imaginó entonces un crimen urdido por una confederación de universitarios y hombres de poder, temerosos ante el alcance de las teorías de ese pensador estrella. De ahí surgió La séptima función del lenguaje (Seix Barral), su reválida tras el éxito de su novela histórica HHhH. Su nuevo libro es, a la vez un ensayo semiótico y un thriller policial con toques de comedia burda, donde el autor convierte a los sospechosos del crimen a los teóricos del posestructuralismo, como Foucault, Derrida, Deleuze o Lacan, responsables de la revolución de las Humanidades de la Francia de los sesenta. Tampoco se olvida de Mitterand y su archienemigo Giscard d'Estaing, obsesionados con la poderosa séptima función del lenguaje que da título a la novela, completando las seis que enunció el lingüista Roman Jakobson. Laurent Gaudet responde a algunas preguntas formuladas por Alex Vicente. "En el fondo el asesinato es solo un pretexto. El libro parte de esta idea: quien controla el lenguaje tiene el poder. Y el del lenguaje es un poder absoluto, superior al de quien maneja un tanque o un bombardero". " Todo asesinato necesita sospechosos. En este caso, solo podían ser quienes formaban parte del entorno de Barthes. Si iba a hacerles intervenir no podía ser solo a través de mensajes gratuitos. El 75% de lo que Foucault o Derrida dicen en el libro lo dijeron o escribieron en la vida real". ..."Escribo contra una idea rancia de la literatura, contra una representación obsoleta y autosatisfecha de lo que debe ser, que provoca que sigamos tragándonos libros al estilo de Balzac y Chateaubriand. Fueron grandes autores pero de eso ya hace dos siglos...."
Alex Vicente. París. El País, martes 6 de diciembre

miércoles, 7 de diciembre de 2016

Valls se postula para relevar a Hollande

François Hollande anunció el pasado jueves que no participaría en las primarias de la izquierda y, tras su declaración, la cuestión de la candidatura de Manuel Valls no fue si se produciría o no, sino cuándo. El primer ministro despejó las dudas ayer, durante una conferencia en la que se proclamó candidato a los comicios de 2017. Lo dijo ante los habitantes de Evry, la ciudad de la que fue alcalde durante 11 años, en el mismo salón en el que se casó con la violinista Anne Gravoin, presente entre el auditorio. El político de origen español no se anduvo con rodeos. "Sí, soy candidato a la presidencia de la República", admitió nada más que empezar a hablar. "Tengo una fuerza dentro en mí, esta voluntad de servir a mi país más allá de las palabras. Es una convicción total: quiero darlo todo por la Francia que tanto me ha dado", afirmó. Seguidamente anunció la dimisión de sus funciones a partir de hoy, poniendo punto final a las especulaciones sobre su futuro en el Elíseo. Si bien la Constitución  francesa no requiere el abandono del puesto para ser candidato, Valls dijo querer "plena libertad, ofrecer a los franceses un cambio" y "cinco años más a la izquierda". El discurso, una oda la izquierda y los valores galos, comenzó con un feroz ataque a las propuestas de François Fillon, el pretendiente de la derecha a la presidencia.... Consciente de que la fragmentación de la izquierda podría poner en duda sus pretensiones, Valls martilleó un mensaje de unidad. "Hoy tengo una responsabilidad: reunir", reiteró. "La izquierda es grande y bella cuando habla a todos los franceses, cuando reúne, cuando su destino se confunde con el de Francia".....
Alexandra F. Coego. París. La Voz de Galicia, martes 6 de diciembre de 2016

martes, 6 de diciembre de 2016

Iconos del arte moderno en París

Retrato de Sergei Shchukin de Christian Cornelius Krohn
Una muestra en París reconstituye, por primera vez desde 1948, la pinacoteca privada de Sergei Shchukin, un mecenas visionario. Monet tenía 25 años cuando pintó la más atrevida de sus obras, un picnic sobre la hierba, tema moderno e impropio del arte con mayúsculas, que inmortalizó con el formato gigante que se solía reservar para las pinturas históricas. Gauguin regresó de Tahití sintiendo que su vida se había acabado para siempre, como también lo haría su arte. Pintó entonces un cuadro dominado por un rosa intenso e irrealista, con dos mujeres polinesias que no solo aparecían desnudas, sino también colocadas en la mitad derecha del cuadro, sin respetar las reglas más básicas del canon pictórico. Solo un par de años antes, Van Gogh sufrió una de sus crisis en Arlés durante la que se mutiló la oreja. Un doctor acudió a curarle y, para agradecérselo, el holandés lo retrató en un cuadro que condensa la esencia del expresionismo. El médico, que respondía al nombre de Rey, lo encontró ridículo e inverosímil, y decidió abandonarlo en un desván , donde tuvo la misión de tapar un hueco en la pared. Las tres obras tienen, al menos. tres cosas en común. En su tiempo, en el mejor de los casos, generaron la más absoluta indiferencia, antes de revolucionar las reglas de la figuración. Y las tres forman parte del colección de Sergei Shchukin, un empresario moscovita que se enriqueció gracias a la floreciente industria textil en la Rusia del siglo XIX. Más tarde se convertirá también en una de los coleccionistas más visionarios de su tiempo y en uno de los primeros mecenas que impulsaron las vanguardias de la Francia de entresiglos. Se exilió en París donde murió en el anonimato en 1936. Años atrás su colección había sido nacionalizada por Lenin después de la Revolución Rusa. Al llegar al poder Stalin se planteó quemarla , considerándola un síntoma de decadencia burguesa, en las antípodas del dogma del realismo socialista. Finalmente prefirió dividirla entre dos museos distintos -El Hermitage de San Petersburgo y el Puskin de Moscú, donde permaneció oculta en sus depósitos durante décadas. Muchos ya la consideran la exposición del año: unas 10.000 personas pasan a diario por este centro privado para descubrirla. Se espera  que sea un millón antes de su cierre previsto para el 20 de febrero.Son 130 cuadros de la colección Shchukin -sobre un total de 275-, incluyendo 29 obras de Picasso, 22 de Matisse, 12 de Gauguin, 8 de Cézanne y otras de Courbet. Derain, Picasso o Rousseau. "La lista corta la respiración, igual que un poco sus salas. Casi tres años de negociaciones han sido necesarios para reunirlos en París. Es su tesoro nacional, como si España prestase sus Velázquez y el Guernica a la vez", ironiza Jean-Paul Claverie, consejero del magnate Arnault, propietario de la marca Louis Vuitton, e ideólogo de esta fundación. La negociación llegó a pasar por el Eliseo y el Kremlin. " Se necesitaba un terreno neutro para reunir las obras, y ese lugar era París, la ciudad donde Shchukin las compró y luego se exilió", añade.
Alex Vicente.París. El País, 5 de diciembre de 2016

lunes, 5 de diciembre de 2016

El último de la nouvelle vague

El actor Jean-Pierre Léaud
Ni preparado. "El actor está très fatigué", anuncian. ¿No habrá entrevista? "Sí, es la única que concede, pero, ¿puede hacerla sin salir de la cama de su habitación?". Y así, Jean-Pierre Léaud (París,1944), el niño de Los 400 golpes, el hombre que construyó junto al director François Truffaut el personaje de Antoine Doinel en dos décadas de magia fílmica, el actor de Jean-Luc Godard en nueve películas; en definitiva, Léaud, la salsa que usaron los cocineros de la nouvelle vague, hoy se siente como el Rey Sol, su personaje en La muerte de Luis XIV, de Albert Serra, que describe la agonía en la cama, del 9 de agosto al 1 de septiembre de 1715, cuando finaliza un reinado de 72 años, del monarca que aseguraba :"El Estado soy yo". Delante de toda la corte: ministros, nobles, familiares, el joven delfín, médicos. Y, efectivamente, Léaud-Luis XIV espera al periodista en su cama, rodeado por su esposa Brigitte Duvivier, y la traductora. La tripa se le escapa, entre los tirantes, el pantalón y el jersey. A cambio, la mirada brilla juvenil. Ahí se esconde le mito, el talentazo que Truffaut exprimió desde el primer minuto de su carrera, y que ha tenido momentos guadianescos aunque trabajara bajo las órdenes de realizadores  como Bernardo Bertolucci, Pier Paolo  Pasolini, AkKaurismäki, Tsai Ming-Liang y Olivier Assayas. Lo que sigue es un resumen de los parlamentos del Actor Sol. ¿Se siente cómodo en la cama? "Pues sí, me pasé toda la película en ella, es un lugar en el que transcurren muchas de mis horas. Así basé toda mi interpretación: en mis ojos y en mis gestos. Necesitaba una gran intensidad, trabajé duramente en ella. Durante un mes estuve ahí, estirado. Cuando ruedo, voy conociendo al personaje. Al tercer día, empezaron a salir de mí gestos aristocráticos que yo no conocía."....
 Guillermo Belinchón. Madrid. El País, viernes, 25 de noviembre de 2016

sábado, 3 de diciembre de 2016

Jardines de Normandía

Jardines de Giverny. Foto Carma Casulá
Es casi imposible oír Normandía sin que, de inmediato, acudan a tu mente palabras como "desembarco", "aliados", "Segunda Guerra Mundial", o también estampas sublimes con las del batir de las olas contra los rompientes de la costa atlántica, de la silueta del Mont Saint-Michel desvaneciéndose en medio de la bruma, de una pradera sembrada de cruces blancas que se pierden en el horizonte o del túnel submarino, casi de fábula de Julio Verne, que atraviesa el canal de La Mancha. Más allá de la épica bélica y de la lírica romántica, esta región del noroeste francés es por naturaleza y vocación una tierra de jardines. Los hay de todos los estilos y tamaños. Unos están construidos con majestuosas perspectivas y rigor cartesiano, siguiendo la gramática visual del jardín formal (alfombras de céspedes o tapis vert, parterres regulares meticulosamente podados, avenidas rectilíneas, estatuas, juegos de agua...) como los châteaux de Champ-de-Bataille, Galleville, Beaumesnil o Brécy, a los que se suelen referir las guías locales como "un pequeño Versalles en medio de la campiña". Otros, por el contrario imitan a la pintura e intentan introducir una versión idealizada de la naturaleza, como los parques paisajistas, llenos de misterio y evocaciones de tiempos mejores, de Nacqueville, Saint-Just y Argences. La misma elaborada espontaneidad se aprecia en los jardines ingleses d'Angélique, Médizon-Canon y le Champ-de- la Pierre. No faltan tampoco jardines de autor, resultado de las intervenciones de reputados paisajistas contemporáneos,  como Pascal Cribier, quien diseñó La Coquetterie (1982) como una moderna granja ornamental; Sylvie y Patrick Quibel, artífices del romántico de formas pero clásico de espíritu Jardin Plume (1998), o Chantal Lejard-Gasson, que concibió el Jardin du Pays d'Auge (1994) como un circuito mental y sensorial a través de diferentes escenas temáticas. Tampoco quedará defraudado quien visite los Jardines Botánicos de las ciudades de Rouen, Caen, Avranches o el conocido como La Petite Rochelle, una antiguo huerto campesino en la localidad de Rémalard convertido en un jardin des plantes . Los amantes de las rosas no deberían perderse el Jardín de las Rosas Olvidadas de la villa de Balleroy, una auténtico regalo para la vista y el olfato. Fue creado en 1987 por el profesor de horticultura Eric Lenoir con la voluntad de preservar el legado de los floricultores normandos, que conocieron sus días de gloria allá por el siglo XIX. Y aquellos que se sienten atraídos por la sabiduría enigmática de los árboles, que, como escribe Paul Valéry, "exponen en el espacio un misterio del tiempo", disfrutarán paseando por el arboretum de Boiscorde y el d'Harcourt. Otros lugares para percibir la fragancia de las flores del Edén perdido y gozar del festín de lo efímero, en palabras de Michel Baridon, son el huerto monástico de la abadía benedictina de Saint-Georges; el jardín en movimiento del dominio de Vauville, que reúne más de 900 especies de plantas de todos los confines del mundo creciendo libremente, y el parque de Bois des Moutiers, acondicionado en su día por Edwin L. Lutyens y Gertrude Jekyll, destacados representantes del movimiento Arts and Crafts, que armoniza con refinada maestría arquitectura, paisaje y jardines. ....En algún momento de la travesía por este rosario de islas  en tierra firme que son los jardines, acabarás recalando en la pequeña aldea de Giverny, a orillas del Epte, donde el pintor Claude Monet construyó su paraíso terrestre. Este es, sin duda, el más famoso jardín de una tierra ya famosa por sus jardines....
Santiago Beruete. El País Semanal, domingo 27 de noviembre

viernes, 2 de diciembre de 2016

Malta, del barroco al éxtasis

El Festival de Música Barroca de Malta va ganando progresivamente prestigio. Entre el 12 y el 28 de enero del próximo año, celebrará su quinta edición. Es un corto trayecto el que ha recorrido pero ya está considerado como el principal reclamo cultural de la isla mediterránea, que lo puso en marcha en 2013 para ir preparando el terreno a la capitalidad cultural europea que ostentará La Veleta en 2018. Su ideólogo y actual director, Kenneth Zammit Tabona, dio con la tecla del barroco, un estilo en imparable auge gracias a su expansiva brevedad, rasgo que agradece el inquieto público contemporáneo. Era, por otro lado, una época muy a tono con la arquitectura barroca que lucen muchas de las iglesias, palacios y teatros de la ciudad. "En los últimos cuatro años  el interés por la música barroca ha experimentado un enorme crecimiento. Es sin duda un nuevo nicho de marcado para el sector", apunta Zammit Tabona... El concierto inaugural será en la iglesia Ta Giezu y correrá a cargo del ensemble de Pisa Concerto Cavallieri, que desgranará un programa diseñado a mayor gloria de la trompeta, con piezas que ensalzan este instrumento firmadas por Albinoni, Händel, Torelli... Continuarán dos formaciones francesas. Correspondances, fundada en Lyon en 2008 y dirigida por el organista Sébastien Daucé, reivindica a su compositor de cabecera Marc-Antoine Charpentier, de quien interpretarán  su Te Deum en la Catedral de San Juan. Y el Centre de Musique Baroque de Versailles presenta en el Teatru Manoel una curiosa propuesta en la que parodian con marionetas la ópera Atys de Jean-Baptiste Lully.......
A-O. El Cultural 11-11-1016

jueves, 1 de diciembre de 2016

Los colores de nuestros recuerdos

M. Pastoureau
El historiador Michel Pastoureau (París, 1947) se formó en la llamada Escuela de los Anales, el movimiento histórico más importante del siglo XX porque cambió el foco de nuestra mirada desde los grandes salones de los reyes y los nobles hacia la vida cotidiana. De ahí surgieron investigadores como Georges Duby, Fernand Braudel, Jacques Le Goff o March Bloch. Pastoureau encontró su propio hueco porque se especializó en dos temas que hasta entonces habían sido ignorados o despreciados: los colores y los animales (dos campos de investigación a los que llegó a través de la heráldica). Profesor en la École Pratique des Hautes Études de París, Pastoureau ha centrado la mayoría de sus investigaciones en la Edad Media, aunque su curiosidad va mucho más allá y ha pasado toda su carrera tratando de responder a preguntas que pueden parecer irrelevantes pero que no lo son: ¿Por qué las banderas tiene unos colores y no otros? ¿Por qué el verde trae mala suerte en muchos países? ¿Por qué el azul reemplazó al negro en los uniformes? ¿Por qué el cerdo es tabú para algunas religiones? Muchos de sus libros han sido editados en castellano, como El oso. Historia de un rey destronado, Negro o Una Historia simbólica del Occidente medieval. Ganó el Premio Médicis por su libro de memorias Les couleurs de nos souvenirs /Los colores de nuestros recuerdos y su ensayo sobre el azul fue un best seller. Gran aficionado al cine, trabajó como asesor de Éric Rhomer en Perceval (aunque el realizador de la nouvelle vague no hizo ni caso de sus consejos) y con Jean-Jacques Annaud en su versión de El nombre de la rosa. Poco antes de rodar una escena Pastoureau se dió cuenta de que los cerdos en el siglo XIII no eran de color rosa, sino negros o con manchas y tuvo que pintarlos al no encontrar marranos así. El color de los cerdos en el siglo XIII es una de esas cosas sobre las que Pastoureau puede disertar durante horas. La entrevista tiene lugar en su amplio piso de París, situado justo enfrente de las pistas de Roland Garros, al que se acaba de mudar. En persona es tan entretenido, divertido, inmenso y humilde como sus libros....
Guillermo Altares. El País Semanal, 2-10-2016

miércoles, 30 de noviembre de 2016

Hollande resiste la presión de Valls

Fin de semana de alta tensión  en la esfera más alta del Partido Socialista francés (PSF). El pa- sado sábado, las malas noticias para François Hollande se multiplicaron: el Partido Radical de la Izquierda (PRG) propuso una candidata propia a las presidenciales a pesar de que tres de sus miembros son ministros de Manuel Valls. Por su parte los militantes del Partido Comunista han decidido ayer apoyar la candidatura de Jean-Luc Mélénchon y su movimiento "La Francia Insumisa" de cara a los comicios de 2017. Hollande que esperaba una unión de la izquierda detrás de él para enfrentarse a Marine Le Pen y al conservador François Fillon, se encontró con una izquierda aún más fragmentada. Por si sus problemas fueran pocos, Manuel Valls le clavó otro puñal por al espalda. El primer ministro lleva meses insinuando sus ambiciones presidenciales y el domingo las dejó incluso más claras. En una entrevista con Le Journal du Dimanche declaró que,  si bien "tiene relaciones de respeto, amistad y lealtad con el presidente", desde la publicación del libro Un presidente no debería decir eso, el contexto ha cambiado. La publicación a principios de octubre del libro de confidencias, algunas incluyendo secretos de defensa nacional, dañó en gran medida la popularidad del presidente, ya de por sí bajo mínimos....
Alexandra F. Coego. París. La Voz de Galicia, martes 29 de noviembre de 2014

martes, 29 de noviembre de 2016

Aterrizaje en la luna

 Son 12 viñetas. Y valen más de un millón y medio de euros. Una plancha del cómic de Tintín On a marché sur la lune/ Aterrizaje en la Luna alcanzó ayer un récord en una subasta en París: la pieza, adquirida por 1.553.312 euros, marca la cifra más alta jamás pagada en una puja por una plancha simple (de una sola página) de Hergé, según Artcurial, la compañía responsable del evento. El tebeo original fue publicado en 1954 y se estimaba que acabaría vendido por, entre 700.000 y 900.000 euros. El comprador es un coleccionista europeo del que Artcurial no hizo pública la identidad."Las aventuras de Tintín avanzan a través de los siglos, y acompañan a distintas generaciones. Es un personaje vivo, que apasiona a los coleccionistas y tiene un mercado sólido", según Eric Leroy, experto del departamento de cómics de Artcurial. Y recordó que la propia compañía también acogió la subasta que batió en 2014 el récord mundial de la venta de cómic en una puja pública: la responsable fue otra plancha de Tintín, en ese caso doble, del álbum Objetivo: la Lune, adquirida  por 2,65 millones. Sobre la plancha de Aterrizaje en la Luna vendida ayer, Leroy explicó: "Es una de las más importantes de la posguerra, que forma parte de un álbum mítico para muchos coleccionistas y aficionados. Se trata de un momento crítico de la historia del noveno arte. Y las obras de Hergé de esa época son muy raras de encontrar en el mercado". Aparte de Tintín , la subasta, que se celebró entre el vierne y ayer , incluyó a más cómics y sumó ventas por entre 4,1 y 4,3 millones de euros. 
El País. Madrid, domingo 20 de noviembre de 2016

lunes, 28 de noviembre de 2016

La doctora de Brest

Sidse Babett Knudsen
"Si queremos que las cosas cambien, hemos de tomar la iniciativa". Con una trayectoria entre Dinamarca y Francia, en cuyas escuelas de arte dramático se forjó como intérprete, Sidse Babett Knudsen (Copenhague, 1968) la fama le llegó pasados los 40 años con la teleserie Borgen, thriller político en el que interpretaba a la primera ministra danesa. "No creo en la jerarquía de los géneros ni en la de los formatos. Pienso que en la televisión se puede encontrar la misma creatividad que en el cine", manifiesta la actriz. Aquel trabajo le sirvió como lanzadera y ahora mismo Babette Knudsen parece vivir uno de los momentos más dulces de su carrera tras participar en Inferno, junto a Tom Hanks. Aunque ella misma reconoce que "no es una prioridad trabajar en un lugar u otro", su hábitat natural es es el cine europeo. Tras recibir el César a la Mejor Actriz Secundaria por El juez , la intérprete ha vuelto a Francia  para ponerse a las órdenes de la también actriz Emmanuelle Bercot en La doctora de Brest. "Esta película", confiesa Knudsen, "es una proyección del viejo conflicto de David contra Goliat. Pero lo que me intereso del proyecto no es tanto ese espíritu de denuncia contra el poder de la industria farmacéutica como la naturaleza de un personaje que, pese a estar en una posición de inferioridad más que evidente, decidió enfrentarse a ese poder". El filme que inauguró el pasado festival de San Sebastián, está inspirado en el caso de Irène Frachon, una neumóloga francesa que, al descubrir los efectos nocivos que sobre sus pacientes tenía un medicamento contra la diabetes, no cesó hasta que éste fue retirado del mercado. "Mi compromiso es, más que político, artístico. Creo que esta película puede servir de inspiración a muchas personas. Si queremos que las cosas cambien hemos de tomar la iniciativa, no esperar a que las autoridades actúen". La actriz tuvo un contacto con la doctora Frachon: me pareció una mujer excepcionalmente generosa con muchas habilidades sociales y un temperamento muy pasional. Pero también es dueña de una personalidad bastante compleja que la lleva a comportarse de un modo u otro dependiendo de quién sea su interlocutor"......
Jaime Iglesias. El Mundo, viernes 18 de noviembre de 2016

domingo, 27 de noviembre de 2016

Judith Chemla. La superdotada


Judith Chemla dans Une vie, de Stéphane Brizé
Cantante lírica en La Traviata y actriz en Une Vie, de Stéphane Brizé, esta joven de 31 años rompe el escenario y la pantalla. Encuentro con un talento fuera de la norma. No se habla más que de ella. Trabaja mucho en el teatro, en el cine, canta ... Durante mucho tiempo ha sido la reina de papeles de composición, pasando de una vamp a una cría, de una groupie histérica a la adolescente desamparada, noble como Sylvana Mangano, desarmante como Gulietta Masina.:"Hay muchas maneras de hacer este trabajo. Podemos dejarnos llevar construyendo, pero también sentir que vibramos con cosas verdaderas. Hay que reunir las dos...Stéphane Brizé escoge actores cuya naturaleza le habla, y filma lo que es el actor. No busca hacerle construir un personaje. Prefiere su natural. Rechaza la fabricación, el juego. Y yo misma detesto sentir las costuras de lo que hago. Hace 17 años que quería rodar "Une vie", de modo que lleva esta historia en la sangre y no necesita grandes explicaciones: todo ocurre solo...."
Difícil superponer sus papeles, sumar el canto y la comedia sin perturbarse, como ante un fenómeno ilógico (¿cantante que interpreta? ¿actriz que canta? no se sabe muy bien), y más difícil todavía superponer a  esos dos aspectos la mujercita que vemos, frágil,  alta como una pulgada y que debe calzar un 34. Es un prodigio de la transformación, del cambio. Además, el movimiento que va del deslumbramiento a la decadencia , es su destino, en estos momentos. Violeta en Verdi, Jeanne en Une Vie, la película de Brizé sobre una obra de Maupassant, son papeles de mujeres que descienden por una pendiente inexorable. Los golpes de la vida la derrumban, su rostro muestra los estigmas, nadie sabe marchitarse como ella -solo su ojo sigue brillando. En Traviata como en Une Vie  su personaje quiere seguir viviendo, hasta el final: "Interpretar una mujer víctima no me interesa. No es lo que busco...En la película de Brizé , Jeanne conserva una confianza absoluta, una fe quizá idiota y loca". Sabe demostrar el desmoronamiento, la imposible cicatrización interior, y conservar al mismo tiempo el calor de la vida y del deseo. ¡Su rostro es de una tal expresividad!

Stéphane Brizé:"Lo que me fascina de ella es su estado de total disponibilidad. Ningún juicio personal se interpone entre ella y la interpretación. Es inaudito. Está ahí. Toda su persona está ahí. Con todo su pasado, todos sus recovecos. Se puede ir a todas partes con ella, es amplia, ancha. Está siempre en el lugar correcto, como tiene que estar la cámara. Cuando se presentó al casting a penas la conocía. Vino a mostrarme quién es y no lo que sabe hacer .... Se sale del cliché. El talento, a ese nivel, se convierte en un misterio. Asistir a esto, verla hacer, esa libertad, no me lo puedo creer"
Jacques Drillon. L'OBS, del 10 al 16 de noviembre de 2016